Llega un nuevo problema para Wall Street: el techo de deuda. Vamos a ver cómo está el tema y qué consecuencias tendría todo esto para la economía y los mercados financieros.

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Nuevo problema para Wall Street: el techo de deuda

Pues sí, de nuevo vuelve a escena el famoso tema del techo de deuda en Estados unidos, un nuevo quebradero de cabeza para los mercados, pero sobre todo para los dirigentes políticos del país y para muchísimas personas que ven peligrar su sustento de vida, al menos de manera temporal.

Y es que se espera que EE.UU llegue a su límite de endeudamiento y ello haría que el Tesoro se vea abocado a implementar una serie de recursos no convencionales en lo referente a la gestión de tesorería de cara a evitar el impago de la deuda.

Te resumo rápidamente…

El techo de gasto es la máxima cantidad de dinero que el Gobierno del país puede tomar prestado, una cantidad previamente establecida y limitada por el Congreso.

Si Estados Unidos no es capaz de obtener el dinero necesario para acometer los gastos y deberes financieros que tiene, necesita solicitar al Congreso permiso para endeudarme más todavía.

Si el Congreso no le da vía verde, el Gobierno no podría hacer frente a sus obligaciones, como por ejemplo el mantenimiento de servicios públicos esenciales, los beneficios del seguro social, el ejército, las nóminas de los funcionarios, las devoluciones de impuestos, los intereses de deuda, etc.

Es cierto que en los últimos 10 años el problema del techo de deuda se pudo atajar sin que los mercados bursátiles se viesen especialmente salpicados, aunque hace 12 años sí sufrieron ya que Standard & Poor’s rebajó por primera vez la calificación crediticia del país.

Pero ahora, en 2023, lo que se teme y bastante es que la mayoría del partido republicano en el Congreso podría poner las cosas realmente muy complicadas para alcanzar un acuerdo y de ésta manera perjudicar a Joe Biden, máxime sabiendo que las elecciones presidenciales están a la vuelta de la esquina. Los republicanos de hecho han amenazado con utilizar el techo de la deuda para exigir recortes de gastos a los demócratas.

Y es que los republicanos que impedían la elección de McCarthy como presidente podrían mantener el techo de la deuda como rehén junto a sus exigencias en cualquier proyecto de ley sobre el límite de la deuda y este hecho podría acercar peligrosamente las negociaciones sobre el techo de la deuda a la fecha de vencimiento, lo que supondría, una vez más, jugar con fuego al borde del abismo.

La Secretaria del Tesoro, Janet Yellen, de hecho ya ha advertido hace dos semanas que el Gobierno sólo podría pagar sus facturas hasta principios del mes de junio sin incrementar el límite.

Y para que veas que la cosa va en serio, se puede observar que ya hay bonos con vencimiento en la segunda mitad de 2023 con una prima significativa que refleja el riesgo de impago de la deuda.

Y no solo eso, otro indicador de que hay temores fundados es que el coste de asegurar la deuda norteamericana contra el impago durante 5 años sube y asistimos al mayor diferencial de los últimos 10 años.

¿Pero se resolverá el problema esta vez? Mira, la siguiente cita es un clásico en el país:

«Tan seguro como que el sol saldrá mañana por la mañana es que subirá el techo de la deuda de Estados Unidos»

Adagio muy conocido en Wall Street

¿Y qué pasaría en el peor de los casos? A ver, aunque todo es relativo porque depende de cuánto durase el cierre temporal del Gobierno, el PIB caería.

Respecto a los mercados, por un lado estarían los titulares de bonos que tendrían la mala noticia de que el Gobierno no podría abonarles los intereses periódicos previamente pactados.

Y en cuanto a la Bolsa, no creas que es el no va más. En varias ocasiones cayó y en otras subió, es decir, no hay un patrón definido, ya que vuelvo a insistir una vez más, todo depende del tiempo que dure el cierre del Gobierno, bajo qué circunstancias y cómo sea el ánimo negociador de demócratas y republicanos.

Entre los años 1.976 y 1.996 se han producido 17 cierres del Gobierno (es verdad que algunos con duración de un día únicamente). La conclusión es que en 8 ocasiones las Bolsas subieron y que en las ocasiones que la Bolsa cayó sólo en 6 de ellas experimentó un recorte mayor del -2%.

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